Maruganeando es una palabra inventada, concretamente es el gerundio del verbo maruganear, que también es inventado, y que expresa la acción de ir a pasar una temporada, más o menos larga, al municipio segoviano de Marugán donde poder descansar la mente o el cuerpo e incluso ambas cosas a la vez.
La fortuna ha hecho que en este pequeño pueblo exista una urbanización con parcelas amplias y situada dentro de un bosque que hace posible, si uno está un poco atento, la observación del mundo natural casi sin alterar.
Desde siempre me ha atraído la naturaleza, pero en 2005 retomé la afición fotográfica con la llegada de las cámaras digitales y comencé a registrar todo aquello que me resultaba curioso. Han pasado ya diez años desde ese momento y creo que es hora de devolverle a la naturaleza algo de lo que me ha dado durante este tiempo. Por eso quiero que este pequeño proyecto sirva para mostrar a otras personas lo que yo he tenido la suerte de vivir y captar con la cámara en directo.
Ya se que hay muchas páginas de naturaleza y fotografía de naturaleza con bellísimas imágenes de excelentes fotógrafos, por eso no quiero, aunque tampoco creo que pudiera, competir con ellos en este campo. Lo, permitidme que lo llame así, original de esta página es que todas las fotografías que se muestran aquí han sido tomadas dentro de una pequeña parcela de 2.800 metros cuadrados a lo largo de diez años. No pretendo que las fotos sean una maravilla, aunque intento hacerlo lo mejor que se, me interesa más mostrar la gran diversidad de especies que pueden observarse en un espacio tan pequeño y además teniendo en cuenta que no vivo allí y que voy muy de vez en cuando.
Espero que sea de vuestro agrado y gracias por pasar por aquí,
Mario Ximénez